En pleno corazón de Saint-Germain-des-Prés, la plaza Gabriel Pierné es el lugar de moda en primavera. En abril, los cerezos en flor iluminan este bucólico rincón de descanso. Este pequeño rincón del paraíso, escondido detrás del Instituto de Francia, se convierte en el escenario de un mundo natural fascinante y efímero, de visita obligada.