Ofrecer lirios del valle el 1 de mayo es toda una tradición, ya que se considera que estas campanillas traen buena suerte. Para este día tan especial, tiene dos opciones: improvisarse como vendedor aficionado de lirios del valle para conseguir un poco de dinero, o recorrer los bosques de los alrededores de París con su familia en busca de las preciosas ramitas de la suerte.