La temporada del hanami, ese momento eterno en el que los cerezos florecen, deleitándonos con sus fabulosos aromas y sus mil y un tonos de rosa y blanco, dura sólo unas semanas en abril o marzo, según el año. Es una magnífica ocasión para tomar magníficas fotos de los monumentos y parques de París cubiertos de miles de pétalos rosas, y también para aprender un poco más sobre la herencia japonesa de París.
Para los golosos, el placer es bien distinto, ya que cada año el hanami es el momento perfecto para descubrir los pasteles de sakura creados por las pastelerías japonesas de la capital. El sakura es el nombre del cerezo en cuestión, pero también el de sus flores, con las que se crean finos y delicados pasteles para saborear mientras haga buen tiempo.
El dulce de sakura más conocido es el mochi, que simplemente se envuelve en una hoja de cerezo en salmuera con sal y vinagre. Pero hay muchas otras del icias dulces por descubrir, sólo durante unas semanas. ¡He aquí las maravillas!
¿Le apetece probar estos pastelitos hechos con flores u hojas de cerezo?