Tras el paso de la tormenta Caetano, que dejó nieve en toda la región de Île-de-France, excepcionalmente en noviembre, nos preguntamos si no volverá pronto. Sobre todo porque las temperaturas van a bajar en los próximos días y se prevé nieve en toda Francia, especialmente en las llanuras.
A medida que el aire frío del norte se intensifique a partir del sábado, se esperan chubascos de nieve fundida o bolitas de hielo en gran parte de la mitad norte del país. Pero, ¿qué pasará con París y sus alrededores? Los meteorólogos mantienen la cautela y estiman que la probabilidad de nieve en la región parisina sigue siendo incierta, por no decir improbable.
Según Guillaume Séchet, meteorólogo y fundador de Météo-Villes, el aire polar marítimo que desciende por el Mar del Norte traerá tiempo inestable y precipitaciones. Si los copos de nieve se confirman en regiones como el Gran Este o las zonas montañosas, la región de Île-de-France podría verse afectada de forma marginal. Los modelos meteorológicos, en particular el modelo suizo, sugieren la posibilidad de algunos copos muy localizados, sin por ello garantizar un episodio de nieve significativo.
En la región de Île-de-France, las temperaturas oscilarán entre 5 y 7 grados, lo que limitará las condiciones favorables para que la nieve se adhiera al suelo. Por el momento, las previsiones no descartan algunas chispas en las zonas periféricas, pero no se esperan acumulaciones significativas. ¿Es de esperar un manto blanco? De momento no hay nada que lo confirme.
En cambio, las zonas altas se beneficiarán de una nevada importante, a pocos días de la apertura de las estaciones de esquí. Se espera que los Alpes y los Pirineos registren importantes nevadas a partir del sábado.
A principios de la próxima semana, se prevé un enfriamiento más acusado, con temperaturas nocturnas bajo cero y máximas diurnas limitadas a 4 ó 5 grados. Este tiempo más frío irá acompañado de una vuelta a condiciones más estables, lo que reducirá aún más las probabilidades de nieve en la región de Île-de-France.
Así pues, aunque la idea de ver París cubierto de nieve este fin de semana apele a la imaginación, por el momento sigue siendo hipotética. Para saberlo, habrá que seguir de cerca los modelos meteorológicos en los próximos días.
