Hoy, el mundo de la moda se tambalea tras una tragedia que ha golpeado duramente a la Casa Balmain, dirigida por Olivier Rousteing. A pocos días de la presentación de su colección en la Semana de la Moda de París, un misterioso robo ha sacudido los cimientos de Balmain. Fue con palabras cargadas de emoción como el diseñador anunció la nefasta noticia, arrojando un manto de incertidumbre sobre uno de los eventos más esperados de la semana de la moda.
"Esta mañana me he levantado con una sonrisa en la cara mientras empezaba las pruebas para mi próximo desfile a las 9 de la mañana y esto es lo que ha pasado...50 piezas de Balmain robadas. Nos han robado la entrega. Nos han robado el camión. Gracias a Dios el conductor está a salvo. Tantas personas trabajaron tan duro para hacer esta colección. Estamos en el proceso de rehacer todo, pero es tan irrespetuoso. Tantos trabajadores, proveedores, mi equipo y yo. Por favor, tened cuidado, este es el mundo en el que vivimos. Os quiero equipo Balmain y no nos rendiremos. Os quiero ORO".
El robo se habría producido entre uno de los aeropuertos de París y la sede de Balmain, según Libération. Este acto, apenas diez días antes del desfile previsto, supuso un golpe devastador no sólo para Olivier Rousteing y su equipo, sino también para toda la cadena de producción y creación de la casa.
A pesar de ello, el director artístico decidió seguir adelante con el desfile. Más allá de las considerables repercusiones financieras, se trata de un verdadero reto para los artesanos y modistas, que tendrán que producir multitud de trajes en un tiempo récord.
Los aficionados a la moda están expectantes por ver cómo Balmain superará este obstáculo inesperado y seguirá brillando en las pasarelas parisinas. El espectáculo debe continuar, ¡incluso ante la adversidad!