2024 es un año para recordar. París fue la comidilla del mundo. Además de losJuegosOlímpicos y la reapertura de Notre-Dame, en la capital tuvieron lugar otros grandes acontecimientos, algunos de ellos insólitos y originales. Para que no olvide ninguno de los momentos más destacados de este año tan especial, le presentamos algunos de los más memorables.
Empezamos por los festejos que tuvieron lugar en Nochevieja, cuando los Campos Elíseos se transformaron en un gran escenario para celebrar la llegada del año 2024. Miles de espectadores se congregaron en la famosa avenida parisina, totalmente peatonal para la ocasión, para disfrutar de un momento único. ElArco del Triunfo, majestuosamente iluminado, fue el telón de fondo de un espectacular vídeo-mapping, que combinaba imágenes artísticas y retrospectivas del año transcurrido. A medianoche, un deslumbrante castillo de fuegos artificiales incendió el cielo parisino, acompañado de una cuenta atrás festiva que reunió a residentes y visitantes en un ambiente alegre y cordial. Esta celebración confirmó una vez más que París es un destino imprescindible para recibir el Año Nuevo con estilo y emoción. Este año el evento será aún más festivo, así que no se pierda el programa.
El domingo 26 de mayo de 2024, los Campos Elíseos se transformaron en una inmensa zona de picnic que acogió a unos 4.000 participantes en un almuerzo único al aire libre. Un gigantesco mantel de guinga de 216 metros de largo y 4.212 metros cuadrados de superficie se extendía desde elArco del Triunfo hasta la avenida Jorge V, ofreciendo a los invitados un marco de convivencia insólito. Las animaciones musicales y lúdicas puntuaron esta jornada excepcional, dejando una impresión duradera gracias a su carácter único y festivo.
En la noche del 6 al 7 de junio de 2024, a menos de 50 días del comienzo de los Juegos Olímpicos de París, la Torre Eiffel se adornó con los cinco anillos olímpicos entre su primer y segundo piso. Esta instalación, fruto de la colaboración entre la Société d'Exploitation de la Tour Eiffel (SETE) y ArcelorMittal, representa una proeza técnica extraordinaria. Los anillos, de 29 metros de ancho y 13 metros de alto, se fabricaron con acero reciclado producido en Francia. Su instalación, a más de 60 metros del suelo, requirió la utilización de imponentes grúas y la intervención de una treintena de personas. Esta decoración simbólica permanecerá en su lugar hasta el final de los Juegos Paralímpicos, iluminando la capital y recordándonos el espíritu universal del deporte.
El relevo de la antorcha olímpica en la región de Île-de-France, y en París en particular, dejó una huella memorable en la historia de los Juegos de 2024. Tras 68 días de viaje por Francia, la llama, portada por numerosos atletas y personalidades, iluminó la capital los días 14 y 15 de julio de 2024, coincidiendo con la Fiesta Nacional.
El 14 de julio de 2024, París celebró sus días festivos con un espectáculo pirotécnico inédito, que contó por primera vez con una coreografía de drones luminosos. El espectáculo, preludio de los inminentes Juegos Olímpicos, iluminó el cielo de París combinando tradición e innovación. Los drones dibujaron figuras emblemáticas, símbolo del espíritu olímpico y de la unidad nacional, ofreciendo a los espectadores una experiencia visual cautivadora. Esta fusión de pirotecnia clásica y tecnología moderna marcó un hito significativo en las celebraciones del 14 de julio, reflejando el compromiso de París de abrazar el futuro al tiempo que honra sus tradiciones.
La ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de París 2024 ofreció un espectáculo único en el Sena, a pesar de la persistente lluvia. Las delegaciones de los 206 países participantes desfilaron a bordo de embarcaciones, ilustrando la unidad y la diversidad olímpicas. Actuaciones increíbles jalonaron la velada, desde efectos especiales hasta apariciones de Lady Gaga, Gojira, Aya Nakamura y Céline Dion. La velada concluyó con un espectacular encendido del pebetero olímpico a cargo de Teddy Rinner y Marie-José Pérec.
El Maratón Pour Tous, organizado el 10 de agosto de 2024, dejó huella al permitir a 20.024 corredores aficionados cubrir el mismo recorrido que los atletas olímpicos, uniendo París con Versalles en una distancia de 42,195 km. Este evento único, nocturno, ofreció una experiencia envolvente, con animaciones luminosas y sonoras a lo largo de todo el recorrido, destacando monumentos emblemáticos como el Louvre, el Grand Palais y la Torre Eiffel. Una carrera de 10 km, también nocturna, atrajo al mismo número de participantes, ofreciendo una alternativa más accesible. Esta iniciativa, aclamada por su carácter integrador y festivo, permitió al gran público vivir el espíritu olímpico de una forma sin precedentes, transformando las calles de París en un teatro deportivo y popular.
El Carnaval Tropical de París, previsto habitualmente en julio, se celebró excepcionalmente el 6 de octubre de 2024 en los Campos Elíseos, con motivo de los Juegos Olímpicos. Esta 22ᵉ edición, bajo el lema "Ultramar unidos por el Olimpismo", reunió a una veintena de comparsas procedentes de París, de la región de Île-de-France, de ultramar y de países como Perú, Colombia y Bolivia. A pesar del lluvioso tiempo otoñal, los participantes desfilaron con entusiasmo ataviados con coloridos trajes y rítmicas coreografías, celebrando la diversidad cultural y el espíritu olímpico.
La reapertura de Notre-Dame de París, tan esperada desde el incendio de 2019, tuvo lugar en diciembre de 2024 en un ambiente emotivo. Además de las ceremonias religiosas, la catedral restaurada acogió a numerosos jefes de Estado y un programa cultural excepcional con conciertos clásicos, música popular y un espectáculo de luz y sonido.
El Grand Palais, parcialmente reabierto tras tres años de renovación, brilló durante los Juegos Olímpicos de París 2024 al acoger las pruebas de esgrima y taekwondo en su legendaria nave, ofreciendo un marco espectacular que mezcla historia y modernidad. Esta reapertura progresiva, a la espera de la finalización de las obras prevista para junio de 2025, va acompañada de una serie de grandes eventos culturales, entre los que destaca el regreso del Grand Palais des Glaces. Del 14 de diciembre de 2024 al 8 de enero de 2025, esta gran pista de hielo efímera, instalada bajo el techo de cristal restaurado, ofrecerá una experiencia mágica, convirtiendo este emblemático lugar en un destino ineludible de las fiestas invernales parisinas.
Por primera vez, el Mercado de Navidad de la Ciudad de París se traslada a la Plaza de la Concordia, hasta el 5 de enero de 2025. El traslado desde la explanada del Hôtel de Ville, actualmente en renovación, ofrece un marco prestigioso entre el Jardín de las Tullerías y los Campos Elíseos. Una imagen inédita para despedir el año por todo lo alto.
En definitiva, un año que no olvidaremos. Larga vida a 2024 y bienvenidos a 2025, que esperamos esté lleno de descubrimientos y sorpresas.
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