El jueves por la noche,elParis La Défense Arena acogió la 3ª edición de la célebre Gala de las Pièces Jaunes. Este extraordinario evento musical y solidario, a beneficio de la Fundación de los Hospitales, contó con una multitud de artistas internacionales y francófonos, todo ello orquestado por nuestro nacional Teddy Riner. Sí, el multipremiado judoka cambió su cinturón negro por un micrófono y dio sus primeros pasos como presentador.
Nada más salir de la estación de metro La Défense - Grande Arche, la tónica estaba marcada. Una impresionante cola serpenteaba hasta la entrada del estadio, pero en realidad todo era fluido. En el interior, la energía se palpaba ya en una sala abarrotada, donde más de la mitad de los 35.000 espectadores agitaban ya sus lightsticks centelleantes (esos palos luminosos adorados por los fans del K-Pop), anticipo de la locura que se avecinaba.
No hubo necesidad de calentar motores, ya que J-Hope, miembro del legendario grupo BTS, abrió el espectáculo bajo una lluvia de gritos agudos y aplausos frenéticos. La Generación Z lo dio todo (tapones recomendados para los no iniciados) para aclamar a su ídolo coreano, mientras Teddy Riner calentaba la sala con una sonrisa XXL y unas sentidas palabras. La gala empezó con fuerza, y eso fue sólo el principio.
Gims siguió con su clásico "Zombie". La potente voz del maestro del pop urbano sacudió las gradas, mientras sus icónicas gafas brillaban bajo los focos. Unas canciones más tarde, volvió con su himno "Sapé comme jamais", transformando el mayor recinto cubierto de Europa en una gigantesca pista de baile. Y no fue Teddy Riner quien dijo lo contrario: ¡te vimos, Teddy!
Tras la adrenalina, llegó el momento de la emoción con John Legend. Piano, luz tenue y su inimitable voz: sus canciones "Ordinary People" y "All of Me" suspendieron el tiempo, sumiendo al público en una dulce nostalgia (sí, todos hemos revivido nuestros amores adolescentes). La magia se amplificó cuando el artista soul reinterpretó "La Vie en Rose" de Édith Piaf con la soprano sudafricana Pretty Yende y el violonchelista Gautier Capuçon, recientemente aplaudidos en la ceremonia de reapertura de Notre-Dame de París el pasado diciembre.
Vuelve el frenesí con Taeyang y G-Dragon, miembros de BigBang, y su explosivo tema "Good Boy". Con su espasmódica coreografía, sus espectaculares efectos visuales y su legendario estribillo, es imposible no entrar en el ritmo, aunque solo hayas escuchado el famoso "I am a good boy".
El torbellino K-Pop continuó con Rosé, la estrella de Blackpink. Tras repasar su coreografía con el presentador judoka y una valiente joven elegida entre el público, la cantante coreana de moda subió al escenario para un momento de ultra conexión con su público con su éxito "APT". Los fans gritaron el estribillo, o más bien "A paté, a patéééé" como si su vida dependiera de ello.
Tras enrolar a la Garde Républicaine en su actuación en lainauguración de los Juegos Olímpicos de París 2024, Aya Nakamura arrasó en el Défense Arena. "40%" y "Baby" resonaron como himnos generacionales, demostrando una vez más que la reina del R&B francés sigue siendo indomable.
Tras ella, Burna Boy, el artista nigeriano de contagiosa energía solar, subió la temperatura. Sus rítmicas melodías y su contagioso carisma amplificaron el buen rollo que ya reinaba en la pista.
A continuación tuvo lugar la emotiva actuación del pianista chino de fama internacional Lang Lang, seguido del fenómeno colombiano del reggaetón J Balvin. Con sus éxitos "I like it" y "Mi gente", el "Príncipe del Reggaetón" ofreció un espectáculo caliente y rebosante de energía frenética. También hizo una declaración de amor a su novia en directo sobre el escenario (lo siento, fans, pero J Balvin ya no es un rompecorazones).
Como colofón a esta velada antológica, la cabeza de cartel de la Gala fue nada menos que Katy Perry. La superestrella estadounidense interpretó una retahíla de éxitos interplanetarios como "Teenage Dream", "Dark Horse" y "Eye of the Tiger", antes de poner el broche de oro a la velada con "Firework". Acompañada de un sinfín de efectos pirotécnicos, la dulce diva del pop cerró la velada en un ambiente de total comunión con un público enloquecido.
También hay que saludar a laOrquesta Lamoureux, dirigida por Adrien Perruchon y Maxime Pascal, que realzó las actuaciones de los artistas sobre el escenario.
Por entre 50 y 80 euros la entrada, laGala des Pièces Jaunes 2025 ofreció una velada única de solidaridad, espectáculos XXL y un cartel excepcional. Y si se la perdió, ¡que no cunda el pánico! El martes 28 de enero de 2025 podrá (re)vivir el espectáculo completo en France 2. Una velada así merece un recordatorio.