Nuestro recorrido por los pueblecitos de París continúa. Tras la Butte-aux-Cailles y los frondosos barrios del distrito 13, vamos a descubrir los pueblos del distrito 14.
El pueblo de Plaisance hace honor a su nombre. Sus numerosas calles son perfectas para pasear un domingo por la tarde. De hecho, se dará cuenta de que es el barrio favorito de muchas parejas con niños, que juegan delante de las coloridas casas unifamiliares. La mayoría de las calles y callejuelas sin salida están reservadas a los peatones, con abundante vegetación y flores para disfrutar. Numerosos talleres de artistas se han instalado aquí para aprovechar la tranquilidad de la zona.
No se pierda la rue des Thermophyles, situada en la Cité Bauer, que es sin duda la calle más bonita del barrio. En primavera, se llena de flores y es de visita obligada. Glicinias de todos los colores adornan las paredes de las casas, que rivalizan en belleza. Eche un vistazo al número 19 de la rue des Thermophyles, donde le espera una bonita puerta en forma de corazón.
El vecino del barrio de Plaisance es el barrio de Petit-Montrouge. ¿Por qué no continúa su visita por los pueblos del distrito 14 pasando por aquí? El Petit-Montrouge es encantador, con sus callejuelas adoquinadas y peatonales, y sus casas con jardín, bellamente decoradas. No en vano, muchos artistas, entre ellos el actor Patrick Dewaere, han vivido aquí. Dewaere terminó su vida en su casa del impasse du Moulin-Vert.
El barrio de Petit-Montrouge atesora numerosos tesoros arquitectónicos. De una calle a otra, las casas cambian completamente de estilo. Los amantes de la arquitectura podrán descubrirlo.
Montsouris es, por supuesto, un gran y hermoso parque con colinas, pero también es un bonito barrio con un aspecto sorprendentemente atractivo, todo alrededor del parque. Algunas casas están construidas como pequeños chalets, otras son de estilo Art Déco o Art Nouveau. La mayoría están cubiertas de hiedra trepadora y vegetación.
Muchos artistas han vivido aquí. Georges Braque, por ejemplo. Otros artistas, como Le Corbusier y Gilles Buisson, incluso diseñaron algunas de las casas. Una riqueza histórica, artística y arquitectónica que no debe perderse.
