Auvers-sur-Oise ha atraído durante mucho tiempo a artistas de todo tipo por la belleza y la tranquilidad de su entorno. Entre ellos, Paul Cézanne, Camille Pissarro... y Vincent Van Gogh. Esta pequeña localidad a unos treinta kilómetros de París es incluso el último lugar donde vivió el pintor de girasoles: murió aquí hace 130 años, el 29 de julio de 1890. En 2020, el pueblo atrae a muchos amantes del arte que vienen a admirar los lugares pintados por Van Gogh. Ahora se les abre un nuevo lugar de peregrinación... y con él una sorpresa.
Pasear por Auvers-sur-Oise es como hacerlo por los cuadros del pintor holandés. Los carteles a lo largo del camino permiten comparar la obra con la realidad. Puede detenerse ante laiglesia de la ciudad, imaginar las espigas de trigo creciendo suavemente en los campos, visitar la antigua casa del doctor Gachet o detenerse un momento ante la tumba de Vincent Van Gogh, enterrado junto a su hermano Theo.
La ciudad también cuenta con un hermoso castillo y un museo, el Musée Daubigny. Y, por supuesto, el imprescindibleAuberge Ravoux, donde se alojaron Van Gogh y muchos de sus compañeros artistas. La posada está cerrada por reformas hasta marzo de 2021. Aunque tendrá que esperar un poco más para (re)ver el famoso dormitorio de Vincent Van Gogh, puede consolarse admirando el exterior del edificio e imaginando todas las historias que allí se han desarrollado.
130 años después de la muerte del pintor holandés, una nueva etapa espera a los visitantes. Inaugurado el 28 de julio de 2020, este discreto lugar es de vital importancia para quienes deseen desandar el camino recorrido por Van Gogh durante los últimos días de su vida. Hace unos meses, un investigador descubrió el lugar exacto donde el artista pintó su último lienzo y, por tanto, donde pasó su último día.
El secreto de Racine
Es una historia insólita y conmovedora que surgió durante el encierro. Wouter Van der Veen es profesor universitario e investigador de la vida y obra de Vincent Van Gogh. También dirige elInstituto Van Gogh de Auvers-sur-Oise. Mientras preparaba una exposición sobre la historia de la ciudad, sus ojos se posaron en una vieja postal. El investigador reconoció árboles, rocas y una composición que podía verse en el último cuadro pintado por Vincent Van Gogh la mañana de su suicidio, Racine.
Para no dejarse llevar y desvirtuar el análisis, Wouter Van der Veen se obliga a ser prudente. Sin embargo, cuanto más diseccionaba la postal y el cuadro, más desaparecían sus dudas: acababa de descubrir el lugar donde Vincent Van Gogh había pintado su última obra. La declaración de un testigo indica que el pintor empezó a trabajar en el lienzo por la mañana, pero los colores utilizados en el cuadro indican que seguía trabajando en él a última hora de la tarde.
Van Gogh pasó así su último día en un pequeño camino que conduce a los campos, a un centenar de metros de la posada donde se alojaba, frente a una espesura de árboles, piedras y hierba. El descubrimiento cuenta con el apoyo de Teio Meedendorp, investigador del Museo Van Gogh de Amsterdam, que tiene expuesto el cuadro original.
Una despedida agridulce
Para Wouter Van der Veen, este cuadro es una colorida carta de despedida: "Todo en su pintura habla dela humanidad. Las raíces son las luchas de la vida, la muerte y la renovación ", explica el conferenciante. También apoya la idea de que el acto suicida que acabó con la vida del pintor no fue fruto de un momento de locura. "Cada uno de los cuadros de Van Gogh está extremadamente bien pensado. Pintaba todo el día, estaba en plena posesión de sus medios, de su razón, para realizar esta obra".
Así pues, el suicidio de Van Gogh no fue el acto de un hombre perdido en su locura, abrumado por una mente enferma y desquiciada. Vincent Van Gogh eligió libre y conscientemente poner fin a su vida, al no tener ya ni el deseo ni la fuerza para combatir las dificultades y el dolor que habían marcado su vida de hombre.
Para Vincent Van Gogh, el final de una vida no era el final de todo. Hoy sabemos que tenía razón. Aunque nos hubiera gustado que viviera más tiempo y pintara más obras maestras, la carrera de Van Gogh continúa mucho después de su muerte. Su historia sigue viva en los museos y asociaciones que le rinden homenaje. Sigue viva a través de su familia, de los descendientes de su hermano. Y sigue viva a través de todos los entusiastas, de todos aquellos que fueron tocados por su arte y que, a su vez, vienen a recorrer los senderos de Auvers-sur-Oise.
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Fechas y horario de apertura
Desde el 21 de noviembre de 2024
Ubicación
Castillo de Auvers sur Oise
Château d'Auvers sur Oise
95430 Auvers sur Oise
Información sobre accesibilidad
Sitio web oficial
www.ville-auverssuroise.fr