Antes era un edificio de oficinas. Desde octubre de 2014, un sublime hotel de 4 estrellas llamado Le Marianne. Mientras tanto, un apasionado propietario quiso invertir en un hotel íntimo y artístico. Íntimo, porque cada habitación está diseñada como un pequeño piso parisino (¡y bien sabe Dios que en París vivimos en pisos pequeños!), algunas con vistas al patio, otras con balcones a la calle. Artístico, porque fue diseñado por un dúo creativo, Vincent Bastie y Charles Zana, y decorado con obras de arte, algunas de la colección personal del propietario.
Desde el momento en que se entra, el hotel invita a un lujoso capullo de suavidad y elegancia. Mármol blanco y negro para la recepción, terciopelo para los asientos de la sala de lectura, justo a la derecha al entrar: podrá sentarse allí con placer durante horas, disfrutando de la redondez de los asientos diseñados por Charles Zana y de la magnífica chimenea de mármol, coronada por un espejo redondo y rodeada de libros y fotografías.
Las habitaciones y los salones no son muy grandes: el patio reservado para el desayuno es agradable, todo transparente y verde, pero sólo tiene unas pocas mesas. Así que aquí no hay autocares de turistas ni grupos de colegas. Puede ir solo, en pareja o en familia, para disfrutar de un ambiente muy íntimo.
En el sótano, hay una zona de bienestar, con varias máquinas de ejercicios, un baño de vapor y una sala de masajes donde los clientes pueden relajarse tras un día recorriendo museos y tiendas.
Pasemos a las habitaciones: con habitaciones clásicas (390 euros), superiores (450) y de lujo (550), el hotel ofrece una interesante coherencia estética en cuanto a colores y motivos. Charles Zana ha diseñado grandes cabeceros con un estampado (rombos, rayas o puntos) a juego con la monocromía de cada habitación: mostaza para una, blanco y negro para la otra... El objetivo es que todas las habitaciones sean diferentes pero tengan un espíritu similar, para que si los huéspedes vuelven al hotel, encuentren una familiaridad sin caer en una experiencia repetitiva. Una idea encantadora, ¿verdad?
Los cuartos de baño son sublimes: mármol negro o azulejos marrones, una gran ducha o bañera, ya puede imaginarse pasando agradables momentos mimando su cuerpo. El dormitorio dispone de amplios armarios. Ramos de flores y cuencos de fruta completan la decoración.
Enresumen, todo está hecho para que el huésped se sienta como en casa, al tiempo que ofrece una experiencia típicamente parisina: ya sea mordiendo una uva en el balcón de hierro forjado u observando a los vecinos de enfrente en el pequeño patio, el huésped vivirá un París íntimo, visto desde dentro. Nos encanta este hotel por sus colores elegantes y su suavidad: sólo pasar una hora aquí nos dio una sensación de calma y calidez. ¡Una dirección encantadora!
Ubicación
Hotel Le Marianne
11 Rue Paul Baudry
75008 Paris 8
Acceda a
Estación de metro Franklin Roosevelt
Tarifas
chambre classique : €390
chambre supérieure : €450
chambre de luxe : €550