Traslos recientes disturbios y violencia urbana por la muerte de Nahel, David Lisnard, Presidente de la Asociación de Maestros de Francia (AMF), convoca una concentración cívica el lunes 3 de julio. Es un llamamiento a la unidad, un intento de calmar un clima de tensión nacional.
El objetivo declarado es animar a la población y a los cargos electos a concentrarse ante los ayuntamientos de toda Francia, en particular en la región de Île-de-France, concretamente a mediodía. Esta movilización se hace eco del violento atentado con coche bomba contra el domicilio del alcalde de L'Haÿ-les-Roses, que desencadenó una ola de indignación en todo el país.
En este contexto, la AMF ha hecho público un comunicado en el que llama a la movilización cívica de los ciudadanos para restablecer el orden republicano. Desde el pasado martes, los ayuntamientos franceses han sido escenario de graves disturbios, dirigidos con extrema violencia contra símbolos republicanos como ayuntamientos, escuelas, bibliotecas y policías municipales. En señal de solidaridad, los ayuntamientos harán sonar sus sirenas a la hora de la concentración prevista.
Además de la situación en L'Haÿ-les-Roses, otros municipios se han visto afectados por la violencia. El alcalde de Charly, al sur de Lyon, denunció un artefacto destinado a provocar un incendio en su domicilio. Afortunadamente, no hubo víctimas.
En un clima especialmente tenso, esta voluntad de unión ofrece un rayo de esperanza. De hecho, los llamamientos a la calma lanzados por los familiares de Nahel parecen haber dado sus frutos tras una noche mucho más tranquila. A primera hora de la mañana del lunes, el Ministerio del Interior sólo registró 157 detenciones en todo el país, frente a las 718 del domingo y las 1.311 del sábado.
Por su parte, el Gobierno mantiene una postura firme. La primera ministra, Elisabeth Borne, ha asegurado a los alcaldes que el Gobierno no permitirá que ningún acto de violencia quede impune y que se aplicarán las sanciones más severas posibles. Por su parte, Emmanuel Macron recibirá el lunes a los presidentes de las dos asambleas, antes de entrevistarse el martes con los alcaldes de más de 220 municipios afectados por la violencia.
Programas previstos:
Esta movilización cívica es un llamamiento a la unidad, a la vuelta a la calma y al respeto del orden republicano. Subraya la importancia del papel de cada ciudadano en el mantenimiento de la paz social y el respeto de las instituciones. Frente a la violencia actual, la República está siendo atacada, y juntos podemos protegerla y preservarla. Así pues, este lunes a mediodía, ante todos los ayuntamientos de Francia, mostremos nuestro apoyo a la movilización cívica para restablecer el orden.