Después de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París 2024, la mitad de la plaza de la Concordia dejará de ser accesible a los automovilistas. La zona se convertirá en un paseo marítimo, al igual que el Trocadero y el Campo de Marte.
La
transformación urbana de París
tras los Juegos Olímpicos va a ser radical, según declaraciones de la alcaldesa Anne Hidalgo el pasado mes de enero. Después de los Juegos Olímpicos de 2024,
la mitad de la plaza de la Concordia "no se devolverá a los automovilistas", lo que supone un paso importante en la estrategia de la alcaldesa para
reducir la presencia de coches en la capital. La mayor plaza de la ciudad se
dedicará al paseo, ofreciendo a parisinos y visitantes una zona peatonal desde las Tullerías hasta el obelisco.
En La
Tribune Dimanche, Anne Hidalgo subraya que esta decisión contribuirá a mejorar la fluidez del tráfico, afirmando que
"el lugar cedido a los coches en este lugar emblemático no habrá sido más que un paréntesis en la historia". Con esta transformación,
"la plaza de la Concordia, el Trocadero e Iéna (...) el Campo de Marte constituyen 50 hectáreas de zonas peatonales y plantadas para pasear", acompañadas de "60 km de carriles bici adicionales". Estos cambios responden a la voluntad del alcalde de fomentar los modos de transporte sostenibles y crear
espacios verdes accesibles a todos.
A pesar de las limitaciones temporales para los parisinos, la instalación de las sedes olímpicas ha sido un éxito rotundo, reuniendo a vecinos y turistas en torno a las plazas más bellas de la capital.