Entrar en la Biblioteca Richelieu es como cruzar el umbral de la historia de Francia. Los orígenes de esta biblioteca se remontan al siglo XVIII, cuando el Palacio Mazarino fue entronizado en pleno centro de París.
Desde 1721, este palacio alberga la Biblioteca Real, que a su vez, a instancias del abate Bignon, acoge cinco departamentos (Manuscritos, Estampas, Títulos, Medallas y Grabados). Las colecciones se alojaban en varios hoteles (Hôtel de Nevers, Hôtel de Lambert) y varias galerías (Galerie Neuve, Galerie Mazarine) que formaban el Palais Mazarin.
Bajo Napoleón III, se comprendió que la Biblioteca Real necesitaba aún más espacio, aunque ya ocupaba todos los edificios del Palacio Mazarino, incluso el Tesoro y la Bolsa. Desde las guerras napoleónicas, las bibliotecas de la ciudad, como la Bibliothèque Sainte-Geneviève, albergaban los numerosos libros y obras de todo tipo arrebatados al enemigo.
Por ello, se decidió ampliar el emplazamiento de la Bibliothèque Royale, y Henri Labrouste, arquitecto de la Bibliothèque Sainte-Geneviève, fue elegido en 1854 para llevar a cabo las obras. El pliego de condiciones estipulaba que debía ampliar y modernizar el conjunto conservando en la medida de lo posible los diferentes edificios del Palacio Mazarino.
En la década de 1860, el arquitecto construye la maravillosa Sala Labrouste, en la que juega con el metal, el cristal y la loza y crea un magnífico techo inspirado en las cúpulas bizantinas; la tienda central, con su bella estructura metálica iluminada por un techo de cristal cenital ; y el ala Richelieu. También está restaurando la Galerie Mazarine.
Baste decir que el arquitecto no se esforzó mucho por conservar los edificios originales. Fue cortésmente despedido y sucedido por un nuevo arquitecto: Jean Louis Pascal.
Desde 1878 hasta finales del siglo XIX, Pascal restauró la fachada, modernizó el ala de Cotte, construyó la sala de lectura de los Manuscritos y la embelleció con carpintería Luis XV rescatada delHôtel de Nevers. También diseñó la Salle Ovale, la segunda sala más grande de la biblioteca. Esta hermosa sala en forma de anfiteatro, de dimensiones impresionantes, está bañada por la luz de su techo acristalado.
En 1912, Jean-Louis Pascal abandonó el proyecto y su ayudante Alfred Recoura tomó el relevo. Recoura se encargó de acondicionar la Salle Ovale, el Cabinet des Médailles y un nuevo salón Luis XV. También dotó a la biblioteca de calefacción y electricidad.
Como puede ver, la Biblioteca Richelieu ha pasado por tantas manos expertas que es una pequeña joya arquitectónica que no puede dejar de visitar. Además, acaba de reabrir sus puertas en 2017 tras varios años de renovación.
Durante la segunda mitad del siglo XX, el crecimiento de las colecciones hizo imposible albergarlas en la Biblioteca Richelieu. Por ello, se decidió trasladarlas a un nuevo emplazamiento: la Biblioteca François Mitterrand.
Ubicación
BnF - Sitio Richelieu
58 rue de Richelieu
75002 Paris 2
Información sobre accesibilidad
Tarifas
Gratuito