Ya es época de fiestas en todos los palacios parisinos, y los mejores pasteleros compiten entre sí para presentar el tronco de Yule más bello y sabroso. Este año, en el Hôtel George V, el acontecimiento adquirió un carácter especial, ya que el jovencísimo chef Maxime Frédéric, junto con todo su equipo, presentó la primera creación de su prometedora carrera.