Enclavado en el emblemático barrio de Saint-Germain-des-Prés, Le Procope es testigo vivo de la historia de París. Fundado en 1686 por Francesco Procopio dei Coltelli (de ahí el nombre del café), un ambicioso siciliano, el café se convirtió rápidamente en una encrucijada intelectual, frecuentada por las mentes más brillantes de la época, como Voltaire, Diderot y Rousseau. Estas paredes, cargadas de historia, fueron cuna de discusiones revolucionarias y de grandes obras literarias. Este es sin duda uno de los mejores restaurantes de París y el café más antiguo que aún existe, y le invitamos a (re)descubrirlo.
A lo largo de los siglos, Le Procope ha sabido conservar su alma, ofreciéndonos un marco que cuenta la historia de Francia, desde la Revolución Francesa hasta las grandes figuras intelectuales del siglo XVIII. El papel pintado de 1830 y la correspondencia de Corneille a Colbert contribuyen a la atmósfera única de este lugar. Declarado Monumento Histórico desde 1962, Le Procope sigue siendo un lugar de visita obligada para los amantes de la historia, la literatura y la política.
La historia de Le Procope es un poderoso recordatorio de la importancia de los lugares de encuentro en el tejido cultural e intelectual de una ciudad. Al seguir innovando al tiempo que honra su pasado, Le Procope demuestra que las instituciones históricas pueden seguir siendo relevantes e inspiradoras siglo tras siglo.
¿Lo sabías? Una de las historias más famosas que se cuentan entre sus muros tiene que ver con Voltaire, uno de sus asiduos más ilustres. Se dice que el filósofo tomaba hasta 40 tazas de café al día, buscando inspiración en esta estimulante bebida. Procope era también un lugar de debate y discusión, en torno a cuyas mesas se forjaron ideas revolucionarias y grandes obras.
Otra anécdota notable es la de la campana de Marat, expuesta en Procope. Jean-Paul Marat, figura emblemática de la Revolución Francesa, utilizaba esta campana para llamar a la calma durante las acaloradas reuniones del club Cordeliers, que se celebraban en este histórico café.
Le Procope también ha sido escenario de poderosos gestos simbólicos, como el sombrero que dejó Napoleón Bonaparte antes de convertirse en emperador. Este gesto era una promesa de volver a recogerlo una vez pagada su deuda, testimonio de la importancia del lugar en la vida social y política de la época.
Pero, ¿qué hay para cenar?
En este restaurante, el menú ofrece un surtido variado de platos que reflejan un enfoque clásico de la cocina francesa. Los entrantes incluyen opciones como velouté de Dubarry con queso Comté AOP y picatostes, y una reconfortante sopa de cebolla gratinada . Los ravioles du Dauphiné, servidos con crema de parmesano y cebollino, aportan un toque delicado al comienzo de la comida.
Entre los platos principales, mariscos como los grandes caracoles de Borgoña y el tartar de dorada real con lima ofrecen apreciables sabores marinos. Las opciones de carne y pescado, como el pavé de salmón con salsa de champán y la dorada asada entera, se preparan de forma que resalten los ingredientes sin demasiadas complicaciones.
Los postres, como la crème brûlée de vainilla Bourbon y el moelleux de chocolate, son clásicos que terminan la comida con una nota dulce tradicional. La selección de helados y sorbetes artesanales de la heladería Procopio ofrece un final refrescante y sencillo.
En general, el menú es una celebración de los fundamentos de la cocina francesa, con platos que se basan en recetas probadas e ingredientes de calidad sin pretender ser excesivamente innovador o gastronómicamente excelente.
Hoy, Le Procope se renueva para seducirnos aún más. Abre un nuevo salón de té, o más bien de café. Desde el mediodía hasta medianoche, es el lugar de moda. Este salón de té es más que una prolongación de Le Procope; es un símbolo de su capacidad para reinventarse sin dejar de ser fiel a su esencia. En un entorno de lo más acogedor, podrá relajarse en los sublimes bancos o en los cómodos sillones para disfrutar de una buena infusión o de un café excepcional, acompañados de una pastelería o de un helado gourmet. Por la noche, los licores están en el menú.
Le Procope nos invita a un viaje en el tiempo, donde cada rincón cuenta una historia, y donde su nuevo salón de té ofrece una nueva experiencia que enriquece aún más su relato legendario.
Le Procope inaugura su salón de té, donde el buen café, la repostería, los helados y los licores van de la mano
Le Procope, el café más antiguo de París, se renueva y estrena nuevos espacios. El establecimiento se amplía y ofrece ahora un café lounge independiente con una decoración refinada, donde podrá relajarse desde el mediodía hasta medianoche. Aquí podrá disfrutar de un buen café, bollería gourmet y generosos helados, así como de sabrosos platos a la carta, en un ambiente acogedor. [Seguir leyendo]
Ubicación
El Procopio
13, Rue de l'Ancienne Comédie
75006 Paris 6
Tarifas
Desserts : €8 - €13
Entrées : €9 - €17
Goûter : €16.5
Plats : €20 - €30
Edad recomendada
Para todos
Sitio web oficial
www.procope.com