Lejos de la Corte de Versalles y sus excesos, la nueva película de Gianluca Jodice, Le Déluge, presenta a Luis XVI y María Antonieta en un drama histórico en plena Revolución Francesa. Interpretados por Guillaume Canet y Mélanie Laurent, asistimos a la caída de la pareja real y al fin de la monarquía absoluta.
El público se sumerge en 1792, en las postrimerías del Antiguo Régimen. El 13 de agosto de 1792, en plena Revolución Francesa, María Antonieta, Luis XVI, su hermana Madame Élisabeth (Aurore Brutin), su hija Marie-Thérèse-Charlotte y su hijo Le Dauphin son conducidos al calabozo de la Tour du Temple. La película se basa libremente en los diarios de Cléry, el ayuda de cámara del Rey que permaneció con él hasta su muerte.
Nuestro veredicto:Esta parte de la historia de María Antonieta y Luis XVI era interesante de explorar y no obtenemos una versión más de la vida de María Antonieta en la corte. Los planos largos y amplios son muy agradables a la vista y nos transportan a 1792. La banda sonora está inteligentemente ambientada, subrayando los escenarios bien elegidos de este oscuro periodo.La transformación de Guillaume Canet es tan impresionante que olvidamos que fue elegido para interpretar a Luis XVI. Lo que tenemos ante nosotros es la visión de un hombre mediocre pero entrañable, brillantemente interpretado por Guillaume Can et, con María Antonieta al límite de sus fuerzas y decepcionada por la incapacidad de su marido para hacer nada.Aunque la historia quizá mereciera algunos giros más, intenta ser fiel a la realidad histórica, y el espectador acaba esperando, como María Antonieta y Luis XVI, la sentencia. Un acertado drama de Gianluca Jodice, en el que el sufrimiento de la familia real se apodera de nuestros corazones de principio a fin.