El Plan Urbano Local de París, presentado el lunes, es fruto de tres años de debates y numerosas negociaciones. El texto, de más de 3.000 páginas, establece una serie de medidas destinadas a transformar la capital en la próxima década. Este gran cambio se basa en una fuerte ambición: alcanzar la neutralidad en carbono de aquí a 2050.
He aquí las principales medidas del PLU:
A pesar de las tensiones iniciales, los distintos partidos de la izquierda han llegado a un acuerdo sobre este PLU. Este texto marca un punto de inflexión histórico para la ciudad de París y un buen ejemplo de unidad política frente a los retos ecológicos y sociales.
El PLUno se detendrá con la votación del Consejo de París. Tendrá que pasar por una encuesta pública para validar todas las nuevas disposiciones legales. La aprobación definitiva se espera para finales de 2024 o principios de 2025.
Cuando se votó el anterior PLU en 2006, a pesar de meses de negociaciones, los ecologistas optaron finalmente por abstenerse, por considerar que el plan estaba demasiado orientado hacia el urbanismo tradicional. En aquel momento, Anne Hidalgo, Alcaldesa de París, se mostró escéptica sobre la posibilidad de alcanzar un consenso: "Sin un acuerdo mayoritario, no habrá PLU", declaró. Entonces encargó a su primer adjunto, Emmanuel Grégoire, una misión política que se adivinaba insuperable: "Haga todo lo posible para reunir a la gente y llegar a un acuerdo, aunque lo dudo mucho", según Le Monde. Hay que creer que todo puede cambiar.
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