París no deja de sorprender, ¡está llena de sorpresas! Bajo nuestros pies, una auténtica pequeña ciudad vive día y noche, donde valientes trabajadores del alc antarillado y ratas se dan cita en las profundidades de la capital. La red de alcantarillado, construida por Eugène Belgrand en el siglo XIX, tiene casi 2.484 km de longitud, y por ella circulan las aguas residuales que limpian la ciudad, gracias a un esfuerzo titánico. Varias veces al año, un barco de 6 toneladas desciende a las entrañas de París para limpiar las alcantarillas durante unas semanas.
Este barco-canal no navega por el Sena, sino por las aguas residuales que hay bajo nuestros pies. Realiza operaciones de limpieza cada tres meses, un dispositivo único dado que la red de París es la única con tuberías a escala humana. Muy lejos de los encantadores canales de Venecia, donde estas embarcaciones se utilizan para rascar el barro y los residuos de los 115 kilómetros de túneles principales. Con unas dimensiones de 9,80 metros de largo y 2,2 metros de ancho, este barco viaja bajo la ciudad entre 8 y 10 semanas, acompañado de agentes.
Hay 11 de estos barcos originales, que se almacenan el resto del año en los talleres de La Villette. Le resultará difícil verlos botados en el distrito 5, a menos que se quede hasta tarde, ya que la vía pública tiene que cerrarse durante varias horas, normalmente por la noche. Los vecinos, en cambio, no querrán perderse la botadura y la apertura de lasescotillas bajo el asfalto, ¡con un barco levitando hasta las alcantarillas!
Acaban de volver a lanzar un barco a las alcantarillas de @París
- Propreté de Paris (@Proprete_Paris) 9 de noviembre de 2023
Una operación necesaria para limpiar una parte de la inmensa red de 2.484 km, construida por Eugène Belgrand en el siglo XIX. Pero, ¿cómo se mete un barco en las alcantarillas? La respuesta en vídeo 😉⤵️ pic.twitter.com/5OwgZL9ASB