La Tour d'Argent, la institución parisina se renueva

Hace más de un año que la Tour d ' Argent cerró sus puertas para una renovación histórica, la más larga y completa de su historia (¡desde 1582!), después de la de 1936, que llevó el restaurante de la planta baja a la 6ª planta. La idea de las obras realizadas por elarquitecto Franklin Azzi era clara: "Llevar La Tour d'Argent, el restaurante más conocido del mundo, al siglo XXI y aprovechar su rica historia para convertirlo en una institución decididamente contemporánea", explica André Terrail, propietario del local.

Así que es natural que esta institución gastronómica parisina estrene nuevos espacios este verano, desde la planta baja hasta la azotea de la Torre. La azotea con vistas a los tejados de zinc se encuentra ahora en la 7ª planta. Con sus vistas sobre la capital y sus grandes monumentos, la azotea de la Tour d'Argent, rodeada de flores y plantas, promete momentos absolutamente románticos.

Un piso más abajo, en la 6ª planta de la Torre, las cosas no han cambiado (tanto) -al menos sobre el papel-, ya que seguirá encontrando el famoso restaurante gastronómico que ha dado tanto prestigio a la Maison. El restaurante La Tour d' Argent, con su impresionante vista de Notre-Dame-de-Paris y la isla Saint-Louis, también ha sido rediseñado por Franklin Azzi. Se ha conservado el azul emblemático y se ha añadido un nuevo techo con efectos cinéticos, así como una gruesa alfombra que evoca el movimiento ondulante del Sena. En cuanto a la cocina, el chef Yannick Franques también ha revisado su ejemplar, ofreciendo nuevas recetas y reinterpretaciones del patrimonio culinario de la Tour d'Argent.

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Una vez terminada la cena, ¿qué le parece descubrir el nuevo Bar des Maillets d'Argent, en la planta baja? Los paneles de roble y el bar inspirado en los años 30 están abiertos desde por la mañana (para el café) hasta por la noche (para los cócteles), con la posibilidad de almorzar, picar algo o incluso cenar. Desde el bar se extiende el salón Frédéric, un homenaje a Frédéric Delair, propietario de 1890 a 1911 e inventor de la famosa receta del pato à la presse, un lugar con un ambiente acogedor y una chimenea que le confiere una intimidad muy especial.

Así que, ¿por qué no aprovechar la oportunidad de probar esta institución parisina?