La Cantine Farmers acaba de abrir en lugar de La Cevicheria, en el número 12 de la rue Martel. Y si el nombre, con sus dulces notas de heno, y la decoración elegante, beige y cubierta de plantas, le hacen creer que se trata de un restaurante donde sólo se pueden comer platos elaborados con semillas, piénselo de nuevo: esta nueva dirección del grupo The Social Club y de la familia Farmers, que ya cuenta con una cafetería y una heladería en París, es mucho más traviesa y gourmet de lo que parece.
Y lo que es mejor, este lugar proteico está abierto todos los días, desde el desayuno hasta la merienda, de 9.00 a 17.00 h., para satisfacer tanto los antojos dulces como los salados, y servir de refugio a los aficionados al teletrabajo que buscan un lugar tranquilo donde trabajar sin dejar de darse el capricho de un pastelito, una galleta, una bebida caliente o un zumo de fruta recién exprimido.
Así, puedes empezar bien el día con tentadoras pastas, con las galletas a la cabeza, pero también con las comidas completas que se ofrecen todos los días desde el momento en que te levantas: huevos revueltos con hierbas, tostadas, bacon o bottarga; tortitas con compota de manzana y sirope de arce.
O si el brunch del domingo te motiva lo suficiente como para levantarte de la cama sin refunfuñar demasiado, con un menú que combina los grandes clásicos del género con pequeños platos de bistró: perdue de brioche con cúrcuma, huevo perfecto, crema de setas y pesto de berros; crema de alcachofas, crumble de café y mejillones a la marinera; puerros asados, mayonesa de jengibre, pomelos, almendras y limones confitados; arroz con leche, caramelo de mantequilla salada y lascas de merengue; y, por supuesto, tartas y pasteles... Suficiente para abrir el apetito.
A mediodía, el menú se reduce a 3 entrantes, 3 platos principales y 3 postres, que cambian cada día, con siempre al menos una opción para vegetarianos. Tras los fogones, el chef Thibault Eurin disfruta trabajando con plantas y productos sencillos, a veces olvidados, como las hortalizas de raíz.
Tras su paso por las cocinas de restaurantes parisinos con fama de ser endiabladamente cárnicos(Bien Elevé, Bien Ficelé), después de haberse curtido en restaurantes con estrellas Michelin, el chef da tanta importancia al sabor de sus platos cárnicos como a los vegetarianos, como demuestran estas zanahorias asadas con miel y pimienta de Jamaica, mimolette, rábano negro y yogur de nuez moscada ; o este apio asado al tandoori, condimento de apio y avellana, copos de avena y muselina de butternut.
Prueba, una vez más, de que la bistronomía parisina está evolucionando más que nunca, la Cantine Farmers es una de esas nuevas direcciones bistronómicas que se niegan a ser prohibitivamente caras, ofreciendo sus platos cuidadosamente elaborados y generosamente servidos en menús de mediodía que van desde los 21 euros por un entrante-principio o plato-postre hasta los 26 euros por un entrante-principio-postre. No se puede ser más asequible, después de todo esto es París.
El resultado es uno de los mejores platos que hemos probado este año, un tartar de ternera (+2€ en el menú), el crisol definitivo, acompañado de fete desmigada, avellanas, tabulé de brócoli y una impresionante mostaza violeta; seguido de media pechuga de pato (+3€ en el menú), servida rosada como debe ser, y acompañada de un puré de boniato tan fino que se deshace, patatas fritas de verduras y un jugo de carne con cuerpo.
Para el postre, el chef Thibault Eurin también se pone manos a la masa para traernos un éclair de café modernizado, que me parece un gran acierto. Te vas con la sensación de haber comido algo realmente bueno por un precio más que razonable. Una dirección a tener en cuenta si se pasea por Estrasburgo Saint-Denis.
Ubicación
La Cantine Agricultores
12 Rue Martel
75010 Paris 10
Sitio web oficial
www.instagram.com