Las cosas se calientan enArts et Métiers, y más concretamente en el restaurante Datsha, que ya había recibido un lavado de cara hace algún tiempo, y que acoge al chef Baptiste Tr udel tras los fogones desde hace un año. Baptiste Trudel toma el relevo de la jefa de cocina Alexia Duchêne, que abrió el restaurante en 2020, y del dúo Vincent Bessy y Joao DaSilva, que compartieron sus pequeños platos durante unos meses en Datsha.
Ahora es el turno del joven chef Baptiste Trudel, también visto en la edición de Top Chef 2021, que ha tomado las riendas de este lugar proteico, que es a la vez restaurante bistronómico en la planta baja y discoteca con su bar escondido, Spootnik, en el sótano. Situado a dos pasos de la Gaîté Lyrique, Datsha tiene toda la intención de ofrecer a sus comensales una experiencia culinaria y sensorial completa. ¿Y ha ganado la apuesta?
Olvídese de los pequeños platos para compartir del anterior dúo de chefs; Baptiste Trudel ha optado por volver a una carta más clásica, con 2 amuse-bouches, 4 entrantes, 5 platos principales, uno de ellos para compartir entre dos, y 2 postres. Sin embargo, la cocina del chef es la que siempre ha sido, incluso en sus anteriores direcciones -Mordu Saint-Germain, por citar una-: experimental, singular y creativa.
Y nada como un lugar insólito, cuidadosamente decorado por el arquitecto Svetislav Ekmesic, con sus techos altos, sus plantas exuberantes caídas del cielo, sus techos industriales de cristal y su gran cocina abierta que desprende buenos olores, para servir de escaparate a una cocina igual de insólita. Datsha lo tiene todo, y los platos son igual de encantadores.
Empiece con el pan plano (15 €), uno de los platos estrella del chef, y el hueso de tuétano (20 €), delicadamente condimentado con tzatziki y chalotas fritas para romper la grasa y la suavidad del tuétano. También son originales el coq en vin en croûte (18€), una versión francesa del tradicional pâté en croûte, y las cigalas (24€) con salsa XO y nata cruda, que esconden sus mejores virtudes bajo un velo tan delicado que nos daría pena rasgarlo.
A continuación, un plato reconfortante que da en el clavo: silla de cordero con salsa de naranja y azafrán (40 €), y un plato que combina el mar y la tierra, en consonancia con el primer amor del chef: morcilla (34 €) con sepia, setas y emulsión de pollo; un matrimonio exitoso. Un pequeño viaje a Normandía, en forma de hoyo (9 €), y estamos listos para pasar al lado dulce del menú.
Los postres fueron un éxito similar, con una creación a base de pera, shiso y avellanas (12 €) y una lengua de coño crujiente con chocolate blanco quemado y ron (12 €). Son postres acordes con los tiempos que corren, bajos en azúcar y que combinan texturas, temperaturas, sabores y finas combinaciones para crear un delicado final. Aunque los platos no son baratos, la experiencia Datsha merece sin duda las distracciones.
Una vez terminada la cena, la experiencia dista mucho de haber terminado. Baje un tramo de escaleras y descubra un bar oculto de aspecto cósmico bajo el restaurante,¡el Spootnik! Su decoración y diseño hacen referencia a la conquista rusa del espacio, y la pieza central es una escultura orbital giratoria.
Durante toda la noche, podrás disfrutar de cócteles creados por los mixólogos John Lenoir y Dylan Kavak. En cuanto a la banda sonora, los DJ residentes pinchan cada noche para deleitar a los juerguistas. Imprescindible para el aperitivo antes de cenar en Datsha, o después de la comida para alargar la velada.
Ubicación
Metro Datsha
57 Rue des Gravilliers
75003 Paris 3
Acceda a
Arts et Métiers (líneas 3 y 11)
Sitio web oficial
datshaunderground.com
Más información
Restaurante abierto de martes a sábado de 19.00 a 23.00 horas.
Bar abierto de miércoles a sábado de 19:00 a 2:00.